QUE
LE PRESTE EL GINOVÉS
LETRILLA SATÍRICA
Que
le preste el ginovés
al
casado su hacienda;
que
al dar su mujer por prenda,
preste
él paciencia después;
que
la cabeza y los pies
le
vista el dinero ajeno,
bueno.
Mas
que venga a suceder
que
sus reales y ducados
se
los vuelvan en cornados
los
cuartos de su mujer;
que
se venga rico a ver
con
semejante regalo,
malo.
Que
el mancebo principal
aplique,
por la pobreza,
a
ser ladrón su nobleza,
por
ser arte liberal;
que
sea podenco del real
más
escondido en el seno,
bueno.
Mas
que en tales destinos
venga
el pobre desdichado,
de
puro descaminado,
a
parar por los caminos;
que
conozca los teatinos
por
intercesión de un palo,
malo.
Que
el hidalgo, por grandeza,
muestre,
cuando riñe a solas,
tormentas
en la cabeza;
que
disfrace su pobreza
con
rostro grave y sereno,
bueno.
Mas
que haciendo tanta estima
de
sus deudos principales,
coma
las ollas nabales,
como
batalla marina;
que
la haga cristalina
a
su capa el pelo ralo,
malo.
FRANCISCO
DE QUEVEDO