Poema para ser leído y cantado
Cesar Vallejo
Sé que hay una persona que me busca en su mano, día y noche,
encontrándome, a cada minuto, en su calzado. ¿Ignora que la noche está
enterrada con espuelas detrás de la cocina?
Sé que hay una persona compuesta de mis partes, a la que integro cuando
va mi talle cabalgando en su exacta piedrecilla. ¿Ignora que a su cofre
no volverá moneda que salió con su retrato?
Sé el dia, pero el sol se me ha escapado; sé el acto universal que hizo en
su cama con ajena valor y esa agua tibia, cuya superficial frecuencia es
una mina. ¿Tan pequeña es, acaso, esa persona, que hasta sus propio pies
así la pisan?
Un gato es el lindero entre ella y yo, al lado mismo de su tasa de agua.
La veo en las esquinas, se abre y cierra su veste, antes palmera
interrogante… ¿Qué podrá hacer sino cambiar de llanto?
Pero me busca y busca. ¡Es una historia!