NEGRA
MARIPOSA

Era solo una princesa noble y tímida soberana
Que se pasaba el tiempo embelesada contemplando mariposas

De alegres y vivos colores
Era solo una joven vulnerable, enamorada del mar
Las brillantes estrellas, la luna y soñadora en libertad

Pero una tarde su vida de ensueño cambio
Cuando a un temible forajido entrego su corazón
Dejándose embelesar y caer en la tentación

Y bajo el sortilegio del amor se perdió
Victima del furtivo poder del mismo luzbel
Como un clandestino ángel de las tinieblas
La arrastro hacia una condenación eterna,
Donde no existía lugar para amar y donde
El tormentoso ruido del péndulo y la tortura
Eran los únicos sonidos que se podían escuchar

El reino del abrasador caos se convirtió en su hogar,

Obligándola a dejar atrás
La paz del mismísimo limbo y atrapándola
En el fuego del abismo infinito
Con la fuerza de un imán la arrastro
Hasta el lugar más recóndito y olvidado
Transformando aquel dulce ángel del mar
En desterrado ángel caído
Y cambiando las hermosas mariposas
Por una densa niebla y azabaches sombras
Olvidando el ruido de los batientes y espumosas olas
Enmendando su propia y venerable alma
Rindiéndose y desvaneciéndose en el fuego
eterno
Custodiada y asediada por tanta y malvada brujería

Anulada y condenada en los confines
Perdió toda su vida sin posibilidad
de pedir una pequeña tregua
convertida en inmortal alteza,
evocada al vacío y desvanecida
vivió atada a la miseria, el dolor, el díscolo
y revoltoso
aroma a fracaso y arrepentida de haber creído
inocentemente en las falsedades del peor de los Lucifer

muñeca de trapo utilizada hasta la saciedad de los
fraudes
las mentiras y las traiciones, en lucha continua
por su propia supervivencia y
Victima de sus propios y ciegos Sentimientos.

Jose
Alberto lopez Menendez