CUANDO
LLEGUE EL MOMENTO

Cuando
ese día llegue, mi ser se vestirá de tristeza,
habrá partido mi ángel, mi oración,
mi consejera.
¿A quién más le contaré mis
penas?
Quién me llamará; amigo lindo?
¿quién pensará en mí en la lejanía!
Ya no habrá más alegría,
cuando llegue … ese día.

Sé que ese día llegará, ojalá
y demore mucho,
primero que pasen, muchos, muchos años,
muchas primaveras, muchos, muchos veranos,
porque a partir, entonces mi alma,
sentirá el frío invernal de tu ausencia.
Los otoños serán fríos,
y de mis ojos, lágrimas como hojas caerán,
haciendo aún más grande mi tristeza,

y
le pediré al Creador,
que te ponga en el firmamento,
para que seas la estrella,
que me cuide a cada momento,
para salir por las noches y contarte mis penas,

y
vivirás eternamente,
porque los ángeles no tienen edad,
y me esperaras en algún lugar,
para continuar nuestra limpia amistad.
y demostraremos al mundo
que fuimos dos personas
que tuvimos la suerte,
que entre millones de gentes,
que entre millones de años,
en un lapso de esta vida,
se lograron encontrar.

Sergio Rodriquez