PAZ
NO ENCUENTRO
Paz no encuentro, y no tengo armas de guerra;
temo
y espero; ardiendo, estoy helado;
vuelo
hasta el cielo, pero yazgo en tierra;
no
estrecho nada, al mundo así abrazado.
Quien me aprisiona no me abre ni cierra,
por
suyo no me da, ni me ha soltado;
y
no me mata Amor ni me deshierra,
ni
quiere verme vivo ni acabado.
Sin
lengua ni ojos veo y voy gritando;
auxilio
pido, y en morir me empeño;
me
odio a mí mismo, y alguien me enamora.
Me
nutro de dolor, río llorando;
muerte
y vida de igual modo desdeño:
en
este estado me tenéis, señora.
FRANCESCO
PETRARCA