AMOR
QUEBRADO
Acabo
de elegir la muerte en vida,
termino de escribir un epitafio,
y sé que nunca más será alegría
la mueca que se asome por mis labios.
Recién
he renunciado a toda dicha,
apenas hace un rato que he llorado
la blanda cobardía de quedarme
con el alma en la mano hecha pedazos.
Si
cada uno hace de su vida
jardín florido o páramo en el llano,
yo sé que nunca más serán las flores
las que muestren para mí otro verano.
Solo
invierno frío hay en mi alma,
escarcha y nieve queda en mi regazo,
y jamás se entibiará mi pecho herido
por el fracaso de un amor quebrado.
Marité Frau