DESORDENADO
EN DESALIÑO AIROSO…
Desordenado
en desaliño airoso
al bullicioso céfiro permite
Nisa el cabello, porque no limite
su nativo esplendor lazo industrioso.
Velo
sutil sobre su pecho hermoso
al gusto esconde lo que al gusto incite;
ni tanto que el tesoro facilite,
ni tanto que de él dude el ojo ansioso.
Así
en traje sucinto reclinada
en alcatifa generosa yace
su gentileza y gala peregrina;
así
la halla Cendón y la taimada
del necio que su pompa satisface
cobra el oro, y a Alexi lo destina.
JUAN
PABLO FORNER